Luego de la caída ante Australia en el último choque de fase de grupos, Argentina terminó segunda en el Grupo B, por lo que su rival será el equipo anfitrión, en lo que supone ser una verdadera batalla desde las 16.30 (hora argentina) de este jueves. Pero no sólo será un duelo caliente dentro del campo de juego, sino que en las tribunas del recinto parisino se sentirá la presión de los aficionados franceses, que se mostraron hostiles en cada presentación albiceleste.
Los hinchas locales hicieron sentir visitantes a los argentinos, silbando a Los Pumas cada vez que hacían su ingreso a la cancha (en los partidos ante Kenia, Samoa y Australia), además de reprobar el himno nacional y festejar los puntos que les convertía el rival de turno. “Estaría bueno jugar acá contra Francia. Como saben, está todo el estadio en contra. Parece que son todos anti-Argentina, así que estaría bueno jugarles acá y ojalá poder ganarles”, sentenció Joaquín Pellandini tras el duelo ante Australia, sin saber que Les Bleus sería el rival de Los Pumas.
Estas actitudes, que se vieron también en el debut de la selección de fútbol ante Marruecos, en Saint-Ettiene, no fueron indiferentes en los jugadores de Los Pumas, que se refirieron al clima hostil que se vive en París cuando los franceses ven una camiseta celeste y blanca. “Disfruto un montón. Me gusta el ambiente. No sé si estarán dolidos por Messi, por la Copa del Mundo o porque no les gustamos. Tal vez estén asustados de nosotros”, dijo Marcos Moneta luego del encuentro ante los Wallabies en el Stade de France.